Salir 1° no es negocio

Salir 1° no es negocio



Inglaterra e Irlanda, líderes de sus zonas, cayeron sin atenuantes contra Francia y Gales respectivamente. Los galos se llevaron el clásico por 19-12 y el Dragón no perdonó a los de verde, que siguen sin conocer semifinales.

Francia 19 - Inglaterra 12

Inglaterra llegaba bien, firme, con los cuatro partidos ganados, como candidato y con los antecedentes a favor. Francia, en cambio, venía de sufrir una dura derrota contra Tonga, clasificando segundo y con problemas internos. Pero en la cancha la historia fue otra. Les Bleus jugaron un gran primer tiempo, aguantaron en el segundo y se llevaron el clásico europeo por 19-12. Así, los galos se vengaron de las eliminaciones en los dos mundiales anteriores y jugarán su sexta semifinal.

Antes de arrancar el partido por los cuartos de final en Auckland, el equipo francés armó una ronda y las palabras hicieron efecto. Se buscó unión y dejar de lado los rumores que rodean al plantel, como la pelea entre jugadores y el haed coach Marc Lievremont. Sirvió. Dos penales de Yachvili abrieron el marcador y los tries de Clerc y Medard marcaron un parcial de 16-0. Llamó la atención, sobre todo por el bajo nivel de los ingleses. Foden descontó, Wilkinson acertó la conversión y la Rosa se puso cerca (16-7), pero Trinh-Duc (fue suplente, entró por Yachvili) metió un drop y volvió a estirar. Cueto, a falta de cuatro minutos para el final, apoyó, pero no alcanzó.

Fue una victoria, pase a semifinales y un desahogo para Francia. Las caras de preocupación que fueron protagonistas durante la previa, se transformaron en sonrisas. Cuando se gana, todo es Disney. Los galos rinden en mundiales, donde apenas una vez no pasaron los cuartos de final (1991), pero tienen la espina de dos finales perdidas. Inglaterra, en cambio, volvió a despedirse antes del top 4 como en 1987 y 1999. Fue el quinto enfrentamiento entre ellos en Copas del Mundo: tres victorias para los ingleses (cuartos 1991, semifinales 2003 y 2007) y dos para los franceses (3° y 4° puesto 1995).

Gales 22 - Irlanda 10

Si no pegás, recibís. Así fue el duelo en Wellington. Gales no perdonó y fue efectivo; Irlanda, en cambio, estuvo tibio, sin ideas y se vuelve a casa. El Dragón ganó 22-10 gracias al gran partido de la pareja de medios, Phillips y Priestland, y a sumar cada vez que se presentó la oportunidad. Así, los galeses se metieron por segunda vez en semifinales, como en 1987, también en tierra neozelandesa. Se esperaba más del Trébol, que ganó su grupo y sigue con el karma de no poder entrar en el top 4.

De entrada, a los 3’, una gran jugada de los de rojo terminó con el try de Shane Williams sobre la bandera y la conversión de Priestland. A partir de ahí Irlanda fue dueño del territorio y de la posesión, pero no del resultado, ya que estuvo cerca del ingoal, pero se volvió, más de una vez, con las manos vacías. Del otro lado no perdonaron, y la otra chance para el Dragón fue con el pie de Halfpenny, que metió un largo penal para el parcial de 10-3 (O’Gara descontó). En el segundo tiempo parecía que la mano venía cambiada y la conquista de Earls, más la conversión de O’Gara, empató el partido. Pero Gales, con una avivada de Mike Phillips, volvió a ponerse arriba. Los tres tries del partido, hasta ahí, se confirmaron por el TMO. Davies aprovechó un hueco y liquidó el partido.

El Dragón fue efectivo y cada vez que pisó la zona roja, se llevó puntos. También defendió de manera correcta. Y fue clave el 9, elegido Man of the Match. Irlanda, que amagó con más luego de vencer a Australia y terminar primero en su grupo, se fue con la cabeza gacha. Además, los de verde nunca pudieron meterse en semifinales. Gales, en cambio, irá por su segunda experiencia entre los mejores cuatro: en 1987, justamente en Nueva Zelanda, perdieron contra los locales y le ganaron el tercer puesto a los Wallabies.

[You must be registered and logged in to see this link.]